Controla los ageotipos y aumenta tu longevidad

El término ageotipos hace referencia a las formas de envejecer. En otras palabras, es la manera como se manifiesta en cada persona el proceso de envejecimiento.

Desde la antigüedad ha existido el interés de las personas en conocer como detener los efectos y huellas dejadas por el paso del tiempo. 

Especialmente ha despertado la curiosidad de muchos como algunas personas parecen resistir mejor los efectos del envejecimiento, mostrando no solo menos arrugas o canas sino además una mayor y mejor resistencia a las enfermedades.  

¿Por qué no todas las personas envejecen igual? 

Posiblemente ya hayas tenido la sensación de que hay personas para quienes el tiempo parece haberse detenido, mientras que para otras los años han sido destructivos. 

Algunos pueden atribuir a la suerte no padecer enfermedades propias del proceso de envejecimiento, mientras que otros atribuyen estos padecimientos al hecho de haber llevado un estilo de vida desenfrenado durante la juventud.

La ciencia parece haber encontrado la verdadera razón del por qué el cuerpo envejece y se enferma. La clave radica en el ageotipo o formas de envejecer. 

¿Qué son los ageotipos?

Es un conjunto de marcadores clínicos comunes determinantes de las pautas de envejecimiento.

Aunque algunos investigadores plantean la existencia de un conjunto impreciso de ageotipos, según un estudio realizado en la Universidad de Stanford existen cuatro tipos de factores de envejecimiento:

Inmune: Se envejece de acuerdo a la forma como el sistema inmunológico responde

Metabólico: La persona envejece de acuerdo a la forma como acumula y descompone sus sustancias corporales (toxinas, hormonas,,,)

Hepático: El envejecimiento está unido a la función del hígado.

Nefrótico: El proceso de envejecer ocurre en este caso debido a la forma como trabajen los riñones. 

Estas 4 formas de envejecer fueron deducidas de un estudio llevado a cabo por un grupo de científicos encabezado por Michael Snyder, PhD  especialista en genética. 

Los científicos visualizaron a través del análisis de sangre y heces patrones de envejecimiento a nivel molecular.

El ageotipo determina los riesgos de enfermedades durante el envejecimiento

En la investigación donde se analizaron las heces y sangre de 43 personas sanas se evaluaron las formas de envejecer y las enfermedades a las que se exponen las personas debido a su ageotipo.  

Por ejemplo, se pudo comprobar que las personas con ageotipo metabólico están expuestas a sufrir de diabetes tipo 2 y a envejecen más rápidamente debido a los efectos de esta enfermedad.

Es interesante notar que en el estudio de Snyder no se consideraron los problemas cardiovasculares, un factor que para otros investigadores puede significar una causa importante de envejecimiento. 

¿Por qué es importante conocer cuál ageotipo posees?

Si una persona comprueba que su ageotipo es hepático, por ejemplo, puede tomar las precauciones necesarias para cambiar su estilo de vida y evitar contraer enfermedades asociadas al hígado. 

Por otro lado, el conocimiento de estos factores de envejecimiento puede ayudar a ser más precisos en el consumo de productos antienvejecimiento, así como en la formulación de dietas apropiadas. 

En esencia, conocer tu ageotipo te puede ayudar a detener el proceso de envejecimiento mediante:

Eliminación de hábitos nocivos (fumar, exceso de bebidas alcohólicas…)

Realización de ejercicios antiedad

Uso de productos antienvejecimiento

Consumo de comidas saludables

Ajustando estas acciones en tu estilo de vida, y de acuerdo al ageotipo que tengas, puedes incidir con mayor eficiencia en la disminución del proceso de envejecimiento.

Conoce tu ageotipo, controla tus hábitos y desacelera tu envejecimiento

El estudio llevado a cabo por Snyder y sus colaboradores demuestra que es posible cambiar la forma en que se envejece para detener el proceso y evitar enfermedades. 

Solo basta conocer el ageotipo que posees y tomar las acciones respectivas para evitar que se produzcan las enfermedades que te harán envejecer.

En otras palabras, detener el proceso de envejecimiento puede reducirse a un cambio de hábitos, es decir, llevar un estilo de vida saludable.

Cambiar tus hábitos puede aumentar tu longevidad 

Uno de los aspectos más interesantes del estudio es que en algunas personas los ageotipos disminuyeron cuando cambiaron sus hábitos. 

Por ejemplo, hubo personas en las que la tasa de envejecimiento disminuyó al cambiar su dieta. En estos sujetos además de producirse una pérdida de peso, hubo una disminución de los niveles de hemoglobina A1C.

A otras personas el tomar estatinas les ayudó a disminuir la creatinina y mejorar la función renal, registrándose también en ellos una disminución en la tasa de envejecimiento. 

La ciencia encierra la clave para no envejecer

Los científicos de Stanford al haber identificado las vías biológicas específicas a lo largo de las cuales las personas envejecen con el tiempo han creído encontrado las causas específicas del envejecimiento.

Los datos cruzados de la evaluación molecular del envejecimiento, el estilo de vida y el historial médico han arrojado luces sobre como detener el deterioro causado por el tiempo en el organismo. 

Sin embargo, el estudio de los factores de envejecimiento no es el único camino explorado hacia la fuente de la juventud.

La actitud mental es clave para no envejecer

Un factor que no fue considerado directamente en el estudio de Stanford fue el aspecto psicológico, el cual puede resultar ser esencial tomando en cuenta lo dicho por un grupo de famosos longevos. 

Varios personajes que sobrepasan los 100 años, entre los que se encontraba Kirk Douglas, quien murió recientemente a la edad de 103 años, coincidieron en afirmar que la actitud mental es clave para una larga vida. 

Henry Morgenthau III, el famoso autor y productor de televisión de un siglo de edad, fue enfático al señalar: “Creo que si te permites deprimirte y sentir pena por ti mismo, puedes quitarte años de tu vida”

Aparte de los hallazgos efectuados por el grupo de científicos de Stanford y los secretos de la longevidad que han alcanzado famosos personajes, existe otro interesante hallazgo sobre la manera de detener el envejecimiento. 

La clave de no envejecer está en tu intestino

Otra de las interesantes teorías que han surgido sobre la forma de alcanzar muchos años de vida saludable también tiene que ver con los hábitos, pero esta vez la clave estaría en el intestino. 

Esta teoría es el producto de una extensa investigación llevada a cabo por científicos de la Universidad de Oviedo en España.  

Se trata de un hallazgo científico muy importante que ha dejado en claro que la clave para evitar el envejecimiento está en tus intestinos. Esto significa que la frase “Somos los que comemos” no estaría tan errada. 

Nuestro modo de alimentarnos y el modo en que colaboramos con el funcionamiento de nuestro sistema digestivo, podrían determinar nuestra calidad y cantidad de vida.