Conectados y cuidados: el futuro del envejecimiento

En los últimos años, los grandes avances en potencia de los ordenadores, big data, internet de las cosas (IdC) e inteligencia artificial (IA) han llegado a casi todas las partes de nuestras vidas, desde habilitar las funciones de asistencia al conductor en los coches hasta el dispositivos que convierten nuestra casa en un hogar inteligente. Pero mientras estas innovaciones afectan a personas de todas las edades, podrían tener un impacto particularmente significativo en los adultos mayores.

La brecha de cuidadores sigue creciendo: para 2030, habrá una proporción de cuatro a uno de cuidadores a adultos mayores. En países como España o Portugal, donde las tasas de natalidad están en pronunciado declive y el envejecimiento de la población avanza a un ritmo veloz, es un problema particularmente grave.

Tecnologías como realidad virtual (VR), IdC y IA ofrecen una gran promesa para este grupo de edad. Aquí os dejamos cinco innovaciones en la industria de la salud que tienen el potencial de transformar las vidas de las personas mayores.

1. Robots para adultos mayores

Los principales avances en la IA significan robots más inteligentes y eficientes. En Japón, el 20 por ciento de la población tiene más de 65 años y, según el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar del país, habrá una escasez de 380.000 enfermeras para 2025.

Para responder a la crisis, los robots están comenzando a ayudar a los adultos mayores en residencias, hospitales y en el hogar. Pepper de SoftBank, un robot "emocional", es una de esas soluciones. Puede responder a la alegría, la tristeza, la ira o la sorpresa y se está utilizando en algunos hospitales belgas para interactuar con los pacientes. El IBM está desarrollando su propia respuesta: el Asistente de Robot de Cuidados Múltiples para Propósitos Múltiples, que actualmente se está probando en Austin, Texas, en un laboratorio de "Envejecimiento en el hogar".

Sin embargo, no todos los robots para mayores vienen en forma humanoide. Robear, un robot de cuidado de enfermería, les brinda a los adultos mayores la oportunidad de cuidarlos como un oso de peluche. Robear, desarrollado por Toshiharu Mukai, científico del Centro de Colaboración Riken-SRK para la Investigación Humana e Interactiva con Robots, puede ayudar con las tareas físicas, como ayudar a los más mayores a salir de la silla de ruedas o regresar a la cama.

2. El Internet de las cosas (IdC)

Un gran número de personas mayores sufren de enfermedades no transmisibles, incluidas afecciones cardiovasculares, problemas respiratorios, cáncer y diabetes. Estas enfermedades de progresión lenta a menudo requieren un tratamiento costoso a largo plazo. Una solución prometedora es Internet of Medical Things, o el internet de las cosas médicas, un surtido de aplicaciones y dispositivos médicos que se conectan a redes de TI para el cuidado de la salud a través de Internet (piensa en los dispositivos inteligentes conectados que recopilan e intercambian datos en tiempo real).

Con el IdC, un médico ahora puede analizar los datos de los signos vitales de un paciente sin salir de la oficina, a través de la cama inteligente BAM Labs conectada a la nube, por ejemplo. Esto tiene el potencial de hacer que la atención domiciliaria sea mucho más eficiente para las personas mayores, y los médicos puedan detectar posibles signos de advertencia en una etapa temprana. Y la promesa de la IdC se extiende desde pequeñas empresas emergentes hasta gigantes tecnológicos. La compañía británica 3Rings ofrece un dispositivo de enchufe inteligente que permite a las personas monitorear las rutinas de sus familiares mayores en el hogar, enviando una alerta cuando se encienden aparatos como un televisor o un hervidor.

3. Sistemas de realidad virtual

Si bien puede ser difícil imaginar a una persona mayor con un auricular en un videojuego de realidad virtual, esta tecnología desempeñará un papel vital en la mejora de la atención a las personas mayores. Al simular un mundo virtual, los tecnólogos pueden desarrollar entornos a medida que pueden proporcionar importantes beneficios para la salud.

En 2017, una empresa nueva llamada Rendever ganó un premio por diseñar un programa de VR para residentes de una instalación de vida asistida. Para los usuarios mayores, la calidad de vida mejora al poder conectarse con amigos y familiares de una manera más inmersiva, mientras que los beneficios del sistema incluyen terapia cognitiva y protecciones contra la demencia mediante el seguimiento de los movimientos oculares.

Con su capacidad para estimular la actividad cerebral, reactivar las neuropatías y eliminar otras distracciones, la VR es una herramienta popular para los médicos que buscan nuevas formas de tratar los trastornos mentales, incluida la enfermedad de Alzheimer. El programa de realidad virtual de Google Earth, por ejemplo, se ha utilizado para revivir los recuerdos de los adultos mayores, una actividad que activa la dopamina en el cerebro y puede actuar como un tratamiento terapéutico para las personas con Alzheimer.

4. Telemedicina

La telemedicina permite la prestación de atención médica remota a través de dispositivos de comunicación. Esto puede proporcionar atención médica de primer nivel a las personas mayores en áreas rurales (reduciendo los costes al reducir las visitas a urgencias, por ejemplo, y brindando a los pacientes mayores acceso más rápido a medicamentos o un diagnóstico).

En un estudio reciente en los Estados Unidos, 1.100 pacientes obtuvieron atención remota utilizando una tablet, básculas con capacidad Bluetooth y otros dispositivos de IdC.

5. Big data y análisis predictivo

Las personas mayores corren un alto riesgo de reingreso hospitalario cuando se trata de insuficiencia cardíaca y el ciclo de readmisión es uno de los mayores problemas en la forma en que el sistema trata a las personas mayores. En respuesta, Parkland Health and Hospital System en Dallas, Texas, está utilizando big data a través de un algoritmo basado en EHR para predecir el riesgo de reingreso en individuos que han sufrido insuficiencia cardíaca. Los que se encuentran en el extremo superior del espectro reciben atención de intervención adicional y, según un estudio, el uso de tales algoritmos redujo las readmisiones en un 26 por ciento.

Son pequeños avances alrededor del globo que el día de mañana pueden hacer una gran diferencia en la vida de todos.