Cuando piensas en inteligencia artificial, la actuación de Arnold Schwarzenegger como el asesino cyborg en la película The Terminator (1984) podría venirte a la mente. Sin embargo, hoy en día, la inteligencia artificial o IA, ha saltado de la gran pantalla a la calle. Una de sus funciones es la de ayudar a diagnosticar, controlar y tratar a los pacientes o ayudar en la asistencia doméstica.
Los agentes interesados en la tecnología de la Inteligencia Artificial en el campo de la medicina y salud están tratando de aprovechar la oportunidad existente en el mercado a través de diferentes fusiones y adquisiciones de varias pequeñas empresas. Los nombres más sonados a día de hoy son Intel Corporation, IBM, Koninklijke Philips N.V, Siemens Healthineers GmbH, Google, BabyLabs Inc, Oncora Medical Inc., Johnson & Johnson, Stryker Corporation y Microsoft Corporation. Sin embargo muchos se preguntan, ¿para qué sirve exactamente la inteligencia artificial en la rama sanitaria?
La IA está marcando la diferencia
No es difícil encontrar ejemplos de cómo la Inteligencia Artificial ya está mejorando los resultados de la atención médica. En el Hospital presbiteriano de Nueva York, por ejemplo, un nuevo centro de comando de IA ayuda a las enfermeras en una sala de control remoto a monitorear pacientes y procesos con herramientas de inteligencia artificial para reducir la fatiga y liberar a los médicos para que puedan pasar más tiempo con los pacientes.
Intel, por otra parte, trabajó con Sharp HealthCare usando la IA en la identificación de pacientes que estaban en riesgo de empeoramiento repentino, lo que podría requerir un equipo de respuesta rápida. El trabajo analítico ha demostrado predictibilidad con un 80% de precisión, lo que permite que se optimice y coloque de forma proactiva equipos de respuesta rápida en puntos clave de los hospitales, e incluso que intervengan antes de que la situación sea más peligrosa para la vida del paciente.
En el Foro Mundial de Innovación Médica 2018 (WMIF) sobre inteligencia artificial presentado por Partners Healthcare, un grupo de investigadores y docentes clínicos destacó algunas de las tecnologías y áreas de la industria de la salud que probablemente tendrán un mayor impacto de la inteligencia artificial en la próximo década.
Unificar la mente y la máquina a través de las interfaces del cerebro-ordenador
Usar ordenadores para comunicarse no es una idea nueva, pero crear interfaces directas entre la tecnología y la mente humana sin la necesidad de teclados, ratones y monitores es un área de investigación de vanguardia que tiene aplicaciones significativas para muchos pacientes.
Las enfermedades neurológicas y los traumas en el sistema nervioso pueden afectar a la capacidad de algunos pacientes para hablar, moverse e interactuar de manera significativa con las personas y sus entornos. Las interfaces cerebro-ordenador (BCI) respaldadas por inteligencia artificial podrían restaurar esas capacidades fundamentales a aquellos que temían haberlas perdido para siempre.
Estas interfaces pueden mejorar drásticamente la calidad de vida de los pacientes con esclerosis lateral amiotrófica o accidentes cerebrovasculares así como también las 500.000 personas en todo el mundo que experimentan lesiones de la médula espinal cada año.
Proporcionar el acceso a la atención en regiones sin desarrollo o en vías de desarrollo
La escasez de proveedores de servicios de salud capacitados, como técnicos de ultrasonido y radiólogos, puede limitar significativamente el acceso a la atención médica en países en desarrollo de todo el mundo. La inteligencia artificial podría ayudar a mitigar los impactos de este grave déficit de personal clínico calificado al hacerse cargo de algunos de los deberes de diagnóstico típicamente asignados a los humanos.
Por ejemplo, las herramientas de imágenes de IA pueden detectar en radiografías de tórax signos de tuberculosis, a menudo alcanzando un nivel de precisión comparable al de los humanos. Esta capacidad podría implementarse a través de una aplicación disponible para proveedores en áreas de bajos recursos, reduciendo la necesidad de un radiólogo de diagnóstico in situ.
"El potencial de esta tecnología para aumentar el acceso a la atención médica es tremendo", dijo Jayashree Kalpathy-Cramer, asistente de Neurociencia en el Hospital General de Massachusetts y profesor asociado de Radiología en HMS.
Mitigar los riesgos de la resistencia antibiótica
La resistencia a los antibióticos es una amenaza creciente para las poblaciones de todo el mundo, ya que su uso excesivo fomenta la evolución de las superbacterias que ya no responden a los tratamientos. Los organismos resistentes a múltiples fármacos pueden causar estragos en el entorno hospitalario, cobrándose miles de vidas cada año.
Los registros electrónicos de salud pueden ayudar a identificar patrones de infección y diagnosticar a los pacientes en riesgo antes de que comiencen a mostrar síntomas. Aprovechar el aprendizaje automático y las herramientas de inteligencia artificial para impulsar estos análisis puede mejorar su precisión y crear alertas más rápidas y precisas para los proveedores de atención médica.
"Las herramientas de IA pueden cumplir con las expectativas de control de infecciones y resistencia a los antibióticos", dijo Erica Shenoy, jefe asociada de la Unidad de Control de Infecciones del Hospital General de Massachusetts.
Seguimiento sanitario a través de wearables y dispositivos personales
Casi todos los consumidores tienen acceso a dispositivos con sensores que pueden recopilar datos valiosos sobre su salud. Desde teléfonos inteligentes con rastreadores de pasos hasta dispositivos portátiles que pueden rastrear un latido del corazón durante todo el día, una proporción creciente de datos relacionados con la salud que se genera sobre la marcha.
Recopilar y analizar estos datos y complementarlos con información proporcionada por el paciente a través de aplicaciones y otros dispositivos de monitoreo del hogar, puede ofrecer una perspectiva única sobre la salud individual y de la población.
Convertir el smartphone en una auténtica en herramienta de diagnóstico
Continuando con el tema de aprovechar el poder de los dispositivos portátiles, los expertos creen que las imágenes tomadas de los teléfonos inteligentes y otras fuentes similares serán un complemento importante de las imágenes de calidad clínica, especialmente en las poblaciones marginadas o las naciones en desarrollo.
La calidad de las cámaras de los teléfonos móviles aumenta cada año y puede producir imágenes que son viables para el análisis mediante algoritmos de inteligencia artificial. La dermatología y la oftalmología son los primeros beneficiarios de esta tendencia.
Investigadores en el Reino Unido han desarrollado una herramienta que identifica enfermedades del desarrollo mediante el análisis de imágenes de la cara de un niño. El algoritmo puede detectar características discretas, como la línea de la mandíbula de un niño, la colocación de los ojos y la nariz, y otros atributos que pueden indicar una anormalidad craneofacial. En la actualidad, la herramienta puede hacer coincidir las imágenes ordinarias con más de 90 trastornos para brindar apoyo en la toma de decisiones clínicas.
"La mayoría de la población está equipada con dispositivos potentes de bolsillo que tienen muchos sensores integrados", dijo Hadi Shafiee, director del Laboratorio de Micro / Nanomedicina y Salud Digital del Hospital de Brigham.
"Esta es una gran oportunidad para nosotros". Casi todos los principales actores de la industria han comenzado a desarrollar software y hardware de IA en sus dispositivos. Eso no es una coincidencia. Todos los días en nuestro mundo digital, generamos más de 2.5 millones de terabytes de datos. En los teléfonos móviles, los fabricantes creen que pueden usar esa información con AI para proporcionar servicios mucho más personalizados y más rápidos e inteligentes ".
El uso de teléfonos inteligentes para recolectar imágenes de ojos, lesiones cutáneas, heridas, infecciones, medicamentos u otros temas puede ayudar a las zonas desatendidas a hacer frente a la escasez de especialistas, al tiempo que reduce el tiempo de diagnóstico para ciertas afecciones.
Y ahora ¿sigues pensando que la IA es sólo cosa de ciencia-ficción?