Cuando escuchas la palabra "gimnasio", ¿piensas en divertidas clases, entrenadores personales y socializar con amigos? ¿O asocias el gimnasio con ruidos fuertes, música a todo volumen y máquinas enormes que no sabes para qué sirven?
Si el ambiente de gimnasio que imaginas te hace sentir incómodo, es posible que te sorprenda saber que un gimnasio para adultos mayores podría hacerte cambiar de opinión. Un gimnasio para personas mayores no solo ofrece todos los beneficios de otros gimnasios, sino que también ofrece una amplia gama de programas de ejercicios para personas mayores, ideal para aquellos que comienzan una nueva rutina de ejercicios o aquellos que han estado inactivos por un tiempo.
1. Mejores precios y descuentos
Las tarifas diarias o mensuales con descuento para personas de cierta edad son el primer indicador del nivel de aptitud para personas mayores de un gimnasio. Un gimnasio que está dispuesto a descontar sus cuotas para adultos mayores es un gimnasio que quiere abrir sus puertas a ese grupo demográfico.
2. Clases solo para mayores
La mayoría de los gimnasios ofrecen varios tipos de clases para los miembros, y muchos gimnasios van más allá para ofrecer clases diseñadas específicamente para entrenamientos para personas mayores, salud o nutrición.
3. Equipo diseñado para personas mayores
Ciertos tipos de equipos de gimnasia pueden ser confusos o incluso peligrosos para las personas mayores. Las complicadas barreras de entrada y salida y las confusas opciones de peso y velocidad pueden dificultar el uso de muchas máquinas de ejercicios para adultos mayores.
Algunos gimnasios tienen equipos que cuentan con mecanismos fáciles de usar para limitar el riesgo de lesiones y tensión en las articulaciones y los músculos. Asegúrate de preguntar sobre cualquier equipo de este tipo durante un recorrido por una instalación de este tipo.
4. Entrenadores personales para mayores
Si bien casi todos los gimnasios emplean entrenadores personales, muchos cuentan con al menos un entrenador acreditado para trabajar con personas de la tercera edad. Pregunta acerca de los entrenadores personales de un gimnasio y si alguno de ellos está especialmente certificado para trabajar con adultos mayores.
5. El sistema de amigos
El sistema de amigos es cuando un gimnasio une a un miembro con otro para dar a cada persona un compañero de entrenamiento. Ir al gimnasio con otra persona puede ser mucho menos intimidante que ir solo, y algunos gimnasios emparejan a personas mayores con otras de la misma edad.
Tener un compañero de entrenamiento puede lograr más que simplemente ayudar a uno a superar su intimidación del gimnasio. Una vida más larga y saludable también puede fomentarse a través de la interacción social que promueve un sistema de amigos. Los estudios han demostrado correlaciones entre la actividad social y la vida útil entre los adultos mayores.
6. Gimnasios sólo para mayores
Los gimnasios exclusivos para personas mayores han estado apareciendo en masa en los últimos años a medida que la nueva generación de adultos mayores entra en la edad de jubilación.
Como su nombre indica, un gimnasio solo para personas mayores es uno que restringe la membresía a personas que tienen al menos una cierta edad, por lo general 50, 55 o 60 años. La restricción de edad no es lo único que distingue a estos gimnasios. Los gimnasios solo para personas de la tercera edad cuentan con máquinas de ejercicios de bajo impacto que son fáciles de usar y suaves para el envejecimiento de las articulaciones y los músculos. Los programas están diseñados pensando en los adultos mayores, y los capacitadores e instructores a menudo están específicamente entrenados para trabajar con personas mayores. Algunos miembros del personal pueden incluso ser personas mayores.
Una ausencia de pesos libres significa menos ruidos fuertes, y en lugar de explotar el rap moderno o la música rock, las melodías de fondo suelen estar orientadas hacia los gustos de una generación más antigua y se reproducen a un nivel de decibelios más bajo. Con todo, estos gimnasios ofrecen un ambiente cómodo para adultos mayores y los harán regresar.
Programas de ejercicios para personas mayores
Cuando se trata de la buena forma física, incluir una variedad de ejercicios en tu rutina diaria es un componente clave para ayudarte a mantener tu movilidad, y el gimnasio es el lugar perfecto para hacerlo. No solo tendrás acceso a instructores de acondicionamiento físico certificados, sino que también tendrás todo el equipo y las clases que necesitas para crear una rutina de entrenamiento equilibrada con los cuatro tipos de ejercicios que te permitán vivir un envejecimiento activo y saludable:
Fuerza: Levantar pesas es una excelente manera de fortalecer tus músculos, pero asegúrate de tener un entrenador certificado para poder ayudarte. Si no te sientes cómodo levantando pesas, las bandas de resistencia son una excelente alternativa. También puedes usar tu propio peso corporal para hacer estos estiramientos y experimentar los beneficios del entrenamiento de fuerza.
Equilibrio: experimentar una pérdida de equilibrio se vuelve más común con la edad, pero inscribirse en una clase de tai chi, por ejemplo, en un gimnasio para personas mayores mejorará tu equilibrio y te ayudará a mantenerte en pie. El Tai Chi también viene con muchos otros beneficios para la salud, incluido el acondicionamiento aeróbico, la flexibilidad y la fuerza muscular.
Aeróbico: al aumentar la respiración y la frecuencia cardíaca, los programas de ejercicios aeróbicos para personas mayores fortalecen el corazón, los pulmones y el sistema circulatorio. Puedes disfrutar de una caminata o trotar en la cinta de correr, nadar en la piscina o tal vez incluso una clase de bailes de salón.
Flexibilidad: hacer ejercicios de flexibilidad no solo estirarás tus músculos, sino que también te ayudará a realizar tareas sencillas que realizas en tu vida diaria, como atarte los zapatos. Afortunadamente, la mayoría de los gimnasios para personas de la tercera edad ofrecen clases de yoga, que es uno de los mejores ejercicios de flexibilidad.